Soy
lo que hallé. Aquello que me fui Encontrando.
Bienvenido
al Maravilloso Club Real de los Humanos.
Todo
y todos los que me hicieron con sus formas y silencios. Compañías y
ausencias.
Aquí
se goza y se sufre, se llora y se ríe, se pierde y se gana...en fin:
Se Vive.
Soy
yo y tú y ellos. Como coro repetido que se pierde en el Misterio.
Tan anexo y distante diapasón de la Esencia.
Eres
mucho más que sólo un eco agradable.
Soy
lo que hallé... y tal vez sobre todo...lo que jamás tuve.
Mi
pequeño conjunto de sumas y restas. El cuaderno de tareas que te
presto o me cedes. La cuadrícula vivida que se deshace sin huella
como el dibujo del dedo en el agua o ese reflejo de luna en cada hoja
de sándalo.
Microcosmos
a escala del Universo. Sueño que nombra lo único. Preciso estrecho
entre dos océanos.
Espejo,
asesino, tijera... cómplice, humo, coito... sombra, señal,
precipicio azul... manos abiertas.
Soy
el que soy...Yo...sin serlo. Y cuanto más Soy, menos me preocupo de
mí.
La
mujer invisible del sueño, sin conocernos, me dejó una pregunta
para ambos:
¿
Si te convirtieras en aire podrías estar solo?
