lunes, 24 de octubre de 2016






          La oportunidad de vivir como humanos es sobre todo un Regalo. Si dirigimos bien nuestro vuelo alcanzamos perspectivas preciosas y privilegiadas...Únicas.

        Hasta en casos extremos...e incluso trágicos...haber tomado esta forma animal avanzada es cierta oportunidad añadida. Presente que nos permite llegar más allá...si uno no se atonta y lo intenta.

        Es cierto que no es fácil hablar así a millones de seres hermanos cuyas existencias son difíciles...queda claro. Y desde la responsabilidad lo hago remarcando el don que todos ellos tienen de comprender nuestro discurso, ser ejemplo que lo haga cambiar o dar la vuelta a nuestras sesudas razones con un sencillo gesto inconsciente. Sin excepción poseen la particular capacidad de escribir un relato que matiza lo que decimos, aportar dos ideas que reflejen otra idea o decidir no escuchar ni un segundo más las sandeces que este idiota dice...o a veces escribe...desde su Sentir o teoría.

        La clave sería justo no perder de vista esa humanidad que nos distingue, dar la ocasión a todos para ejercerla... y sobre manera...ejercerla uno mismo para con todos. Cuando abandonamos nuestra naturaleza brota lo más mecánico y menos ético. Nos perdemos y perdemos. Al evitarnos nos deshumanizamos...y al habitarnos nos lustramos como humanos.

        El paseo existencial de cada cual puede vivirse como un cansino sucederse de pasos, sin sentido, continuo aluvión de pruebas y abismos; o por contra, con otro poso, percibirse como un juego: serio; pero juego, donde además de normas hay vías de escape hasta el último momento. Siempre podemos acariciar nuestros fantasmas, conocerlos y con suerte desde ahí llegar a fundirlos en amor humano.

       En este recreo vital el jugador no es sólo un simple florero decorativo, sino más bien un engranaje esencial del mecanismo último. Por supuesto existen los conflictos o neurosis y menos mal, porque desde ellos se incendia el Corazón Caliente que nos dirige y define. Justo el mismo que sabe distinguir y apagar los fuegos más innecesarios

       Nacen sin aparato digestivo las mariposas...porque para su corta vida no lo necesitarán. Nacemos nosotros con alma y Corazón.


      Podemos ser vuelo o barrera; verso o rigidez; humanos o desalmados.
      Podemos ser....que ya es todo un detalle y excepción.

      No nacemos limitados a ladrar o balar, maullar o hacer gorgoritos, no sabemos sólo hacer panales hexagonales o realizar mecánicamente las mismas misiones...porque nuestra mente humana no es solo mecánica. Para nuestra suerte late en ella lo plástico y libre...el aroma del baile que es aire y cimbrea...la unicidad repetida en aparentes iguales. El fluir del agua o la libertad del viento. Esa es nuestra Gracia. Somos infinita potencia en manos de la Potencia Infinita.

       Y además como premio máximo intuimos que esto que somos es un pálido reflejo de la Luz que lo permite todo. Rescoldo o chispa del Fuego Origen. Rastro de la Fuente... Sombra de la matriz. Es pertinente imaginar desde ahí que todo lo que llene nuestro corazón en esta existencia se hará infinito cuando abandonemos la forma humana y nos fundamos con el Origen Total...que aparenta ser final último.

       El vuelo final es descubrir que por encima de nuestra mejor perspectiva sigue estando la Totalidad. Saber que nuestras alas no son nada sin el aire que las sostiene. Toca entonces elevarse y caer, descansar en los nidos y abandonarlos. Toca Vivir esta humanidad regalo que Ama y Aprende... repartirla en humilde regalo. Toca también y sobre todo reconocer nuestra inquebrantable fragilidad, exiliar a la soberbia y buscar ser los mejores amigos del Amor humano. Toca Vivir.

lunes, 3 de octubre de 2016




            “Vivir sin pensar” no significa en absoluto existir a lo loco, ciego, acelerado o sin sentido...muy al contrario, supone estar atento al Juego Total, del que eres al tiempo tablero, partida y jugador. Vivir en una Presencia total que nos permita por fin ser uno con el Uno que Es.

           No existe mayor grado de responsabilidad. Jamás antes habremos sido tan libres y conscientes de nosotros mismos.

           Son desterrados desde ahí los fallos posibles porque no hay ya nada imaginado o prefijado, anticipado o que se proyecte...sencillamente se cimbrea uno en la complejidad que supone ser el Aire que es tu Esencia y plenitud.

            La manifestación Es... fundida con el Ser que la manifiesta.

            Sería “Vivir sin pensar” la forma máxima de Alineación con ese Universo, Útero, Misterio, Vacío, Dios, Azar que nos contiene, anima, Alienta y mantiene. Lejos de las ortopedias o los añadidos... fuera de lo no natural.

            Vivir sin pensar es entonces no pensar la vida, sino Serla.

            El pensamiento amigo nos es algo tan propio como la respiración o el llanto...no en vano somos un “Homo Sapiens Sapiens” y es muy probable que ese ser bípedo y creativo que gusta del saber, sea un proceso inevitable para descubrir su Fondo último al mirarse en el espejo de lo consciente...espejo que termina diluyéndose y con ello nos transforma. Somos así lo que fuimos siempre... antes incluso de pensarlo. Objeto y sujeto al tiempo. Juego circular.

            Existir desde ahí es al inicio vivido como algo casual, mágico, prodigioso, coincidente. Pero la propia Conciencia Despierta nos hace ir experimentando eso como el verdadero hogar del que salimos en su día por querer racionalizar lo Divino y tratar de delimitar el Abismo que realmente somos y nos sostiene.

            Toca entonces detener tantas ideas...nace el tiempo para permitir que dulces nos laman y acaricien lentamente con la perfecta pura intención de que un día lleguemos a Verlas, a Integrarlas... no por pensadas, sino porque su Iluminación las incorpore a nuestro vuelo de Vida. Sin tensiones de más.

             Soltar sería entonces recoger. Crecer sería entonces Soltar.

              Y sólo la Confianza puede permitirnos ese vuelo sin red aparente, que no precisa ya de añadidos porque nos confunde, al fundirnos, con el Aire que siempre fuimos y estamos atravesando de continuo. Son lícitos los miedos... muy humanos. Desde ellos precisamente debemos partir para elevarnos a ese Más Allá que no deja de estar aquí; pero que nos espera en el espacio allende los pensamientos.

              No pienses nada de lo aquí escrito...déjate tiernamente penetrar por ello. Fluye sin detener los conceptos. Usa el mapa para terminar dejándolo.
Baila olvidando la lucha.
Extiende tus alas del alba que son sonrisa del alma.


             Sé...sin pensar. Y no te quedes pensando.