martes, 26 de julio de 2016

Mis Números Uno...Mis Grammys...mi Luz.




Soy Afortunado y Feliz por Descubrir la Magia de lo Sencillo. Por entrever lo más Humano y humilde en lo que otros llaman pequeño... vislumbrando ese beso dulcísimo que lleva lo anónimo aparentemente olvidado. Hay tantos lindos actos que no generan dividendos, ni rellenan noticieros, ni reportan más autógrafos o fama....hechos bellos que sí encierran en si mismos el Sentido del Vivir. Y doy Gracias por vivirlos.


¿Acaso un concierto de masas puede igualarse a esa amiga que te cuenta que ha elegido una canción de tu último disco para escuchar durante el embarazo y que esté sonando el día de su parto en el momento justo en que la Vida llegue a esta vida? No es éste un súper premio real aunque no sea masivo.


¿Quién me dice a mí que soy menos que nadie por no llenar estadios o salir en la tele a todas horas o vender millones de discos? Tampoco soy más que nadie por ser menos, es cierto...pero reconozco mi fortuna y aquí la detengo en letras.


¿ Quién me cambia a mi por “números uno” esas victorias privadas máximas con que la Luz nos riega? Dónde se dijo que el triunfo era sólo un reconocimiento multitudinario. Sin duda a los famosos les pasarán cosas similares...y ojala tengan el tiempo y la visión precisas para paladearlas.


Cómo explico esos minutos que puedes dedicar a cualquier niño que te mira asombrado porque te ha visto en un video en la tele y ahora te tiene cerca....como le cuento a ese anciano del asilo en el que acabo de tocar que él es el Maestro y yo un operario agradecido. Qué otra cosa puedo hacer sino humillarme cuando alguien te sube a un pedestal de reconocimiento y no es consciente de todos tus defectos, miserias y humanidad.


Sin duda estoy seguro que muchos de los artistas más conocidos mantienen ese hilo que los une a lo Esencial y no son deslumbrados por la Luz que han recibido, sino que desde ella Alumbran y acompañan a otros. Pero también es muy fácil confundir lo Importante por lo aparente. Perderse. Caer en infiernos disfrazados de éxito...efímero humo de orgullo.
Una y otra vez la Vida te inspira. Cada día que practicas el Amor y su Conciencia te sabes Hermanito de todo y todos...más y más, no como una idea que queda guay, sino como un sentir sincero que todo lo impregna. Experiencia.


No importa lo grande que seas...sino lo pequeño que te sepas.


Las Alas del Alba me recuerdan a diario que no me pierda en lo creado, sino que Valore al Creador. Estas letras que ahora lavan tus ojos son mi reconocimiento a tu ser único....absolutamente igual al mío...y tan distinto.


Gracias por el Vuelo Compartido. Yo soy otro nombre de ti...y viceversa.






lunes, 11 de julio de 2016

De locos y cernícalos...Saber ver más allá.

El Amor es lo más.
Algo tan grande que no sabe de tiempos, espacios o especies.
Une lo aparentemente desconectado e iguala todo aquello que nos pudiera resultar sin proporción.
Los sentimientos siempre por encima de los que sienten.
La Magia reinando sobre de la Lógica.

Reivindico aquí y ahora la Vida Verdadera y su esperanza.

La suerte de Viajar por ahí es que uno Vuela sobre muchas historias que lo van llenando y deshaciendo...historias que te asaltan y rasgan en mil idas y venidas sobre versos y palabras y canciones. Historias que escribo sobre las alas del alba para que lleguen así a otros Corazones... a través del lado más cálido de éstos.

Son memorias de lo realmente Real... Historias por las que Vivir se hace aún más lindo e imperdible. Relatos que enlazan por ejemplo locos con cernícalos.
Volando sobre Valencia recogí dos vivencias del infinito amor...a primera vista muy diferente...en el fondo de una exactitud total. Atentos.


Cincuenta años en un manicomio dan para mucho. Por ejemplo sirven para que cincuenta años después un hijo quiera honrar a su padre y realizar una donación muy elevada de dinero para la fila 0 de un concierto de un desconocido chico de Santander.
No importaba el cantante ni sus canciones...ni siquiera fue al acto ese hijo generoso y agradecido, que no pudo disfrutar de su papa por estar confinado este en una isla de locos.
Era lo de menos acudir...lo de más era apoyar al Co-llectiu Obertament que trabaja con, desde, hacia, por y para los propios enfermos mentales, superando los tratamientos con el trato y el estigma de aquellos con su autoestima.
Este Colectivo es un ejemplo a seguir...porque al estar lleno de ángeles no quieren saber más de manicomios, sino que buscan el cielo abierto y las casas y cosas de la Natura...y su fragancia.
Las palabras tienen su energía y vibración...y sin duda manicomio suena a dolor, a infinita tristeza, a miedo y a soledad abandonada. Suena manicomio a olvido y a falta de humanidad. Tiene que sonar ya a pasado y ser superada por otros vocablos más dulces como escucha, ternura, acompañamiento y Crecer juntos.

Poder tocar ese concierto en un teatro medio lleno y por ello medio vacío fue la excusa perfecta para descubrir que las cosas con Corazón siempre tienen sentido más allá de las cifras y los números. Cuánta Gratitud siento.


Y justo desde el sentido...concretamente abordándolo desde su cara oculta del sinsentido; pongo ahorasobre nuestras alas la segunda historia de Amor que la bella Comunidad Valenciana me regaló y así nos donó a dúo.

Imaginaros una locomotora de mil quinientas toneladas de peso.
Imaginaros una vía que sale de un túnel.
Imaginaros una hembra de cernícalo que acaba de capturar justo allí una ínfima lagartija.
Imaginaros el impacto. Imaginaros la muerte. Imaginaros la escena.

Dejar de imaginar. Todo fue así. La Vida enroscándose sobre sí misma.


Lo bello del caso es que un maquinista anónimo lo ve y vive todo.
Lo mágico del caso es que al día siguiente vuelve a pasar por allí...y al tener que guardar una señal de detención...a pesar de que las normas lo prohiben, su corazón no puede obedecerlas... baja de su locomotora y atónito observa un macho de cernícalo que vela aquel cadáver. Lo mismo sucede los tres días siguientes.
Incluso el cuarto día ese humano que está descubriendo su Alma a través de dos rapaces se acerca a aquel macho y éste, tras mirarlo de frente, ni se inmuta. Sigue allí. Esperando a que su amor se levante y puedan volver a volar juntos. Al no ser humano sueña el cernícalo que su dama se reponga de pronto y sigan su común camino. No sabe de límites o plazos. Duro y Ligero al tiempo.

El final de la historia no es menos conmovedor. Aquel maquinista que me contó su aleccionadora experiencia, preocupado por la suerte del cernícalo sobreviviente, para de nuevo su locomotora a metros de aquel ángel alado. Ese Humano que se gana la vida conduciendo máquinas, preocupado por las máquinas asesinas que de continuo pasan por allí, preocupado por la inanición creciente del macho y muy preocupado por los humanos desalmados que nunca leerán historias como esta, se baja de su mastodonte de hierros...recoge al animal fiel y lo lleva a un centro de recuperación de aves. Allí y así terminó una historia de Amor y nació otra.


A mi sólo me resta seguir Volando, Creyendo, me resta escribir historias y cantarlas o contarlas o hacerme imagen viva de la Vida que las historias me cuentan.


Si tú sigues al otro lado mi vuelo tendrá más sentido...si tengo que hacerlo solo Aprenderé el rumbo de lo esencial y sin mirar atás volaré con las alas del alba.